El futuro Centro Cívico Hispanidad en Zaragoza continúa su desarrollo y ya ha alcanzado un 45% de ejecución, mostrando la estructura de hormigón que dará forma a este innovador espacio destinado a mejorar la calidad de vida de los residentes de la zona.

La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, realizó esta mañana una visita a la obra para verificar el avance de los trabajos, que con una inversión aproximada de 5.840.600 euros (IVA incluido) y un plazo de 22 meses, se prevé que finalicen en verano de 2026. Este centro cívico representa un compromiso histórico con la comunidad, ya que llevaba en proyecto desde 2007, tras una larga reivindicación vecinal que buscaba dotar de un equipamiento de calidad a los barrios de Hispanidad, situados entre Delicias y Valdefierro.

La construcción está siendo llevada a cabo por la empresa Construcciones Mariano López Navarro, que resultó adjudicataria en un proceso público de licitación en el que compitieron seis empresas.

La oferta seleccionada no solo garantizó un importante ahorro de más de 517.000 euros para las arcas municipales, sino que también permitió reducir en dos meses el plazo de ejecución, beneficiando así a la comunidad. El espacio se está levantando en un solar municipal de 7.400 metros cuadrados, estratégicamente ubicado junto a la calle del Monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles.

El diseño del edificio, concebido por el arquitecto municipal José Javier Gallardo, combina funcionalidad y sostenibilidad. Con una superficie total de aproximadamente 3.194 metros cuadrados, el complejo se dividirá en dos grandes volúmenes conectados que facilitarán la accesibilidad y el uso conjunto de sus espacios.

Uno de los edificios, de 1.380 metros cuadrados en planta baja, albergará la Sala Multiusos y una zona de exposiciones. El otro, de 1.810 metros cuadrados, adoptará una forma en 'V' con dos plantas. La planta baja, de 905 metros cuadrados, incluirá la recepción, un Centro de Convivencia para mayores y un bar-restaurante. La planta superior, de 882 metros cuadrados, estará destinada a talleres, salas de actividades físicas y culturales, una sala de estudio y una biblioteca.

En una segunda fase del proyecto, se incorporarán la Casa de Juventud, un Centro Infantil de Tiempo Libre y un espacio exterior para actividades deportivas y culturales.

La intención es que este equipamiento sirva como núcleo cultural y sociotécnico para el barrio, promoviendo actividades multidisciplinares dirigidas a todos los públicos.

Además, el proyecto busca crear una red de conexiones comunitarias que fomenten la participación y el intercambio social en el ámbito vecinal.

El proceso de diseño y construcción ha contado con la colaboración constante de los representantes vecinales, quienes han sido informados y consultados en todo momento para garantizar que las instalaciones respondan a las necesidades reales de la comunidad.

La alcaldesa Chueca destacó que también se trabaja en la urbanización del entorno exterior, incluyendo la entrada desde la Vía Hispanidad y una gran zona al aire libre para actividades diversas.

En línea con los objetivos de sostenibilidad del Ayuntamiento, el edificio está diseñado con criterios ecológicos y energéticos. La cubierta será vegetal y la envolvente contará con acristalamientos eficientes y aislamiento avanzado. Los sistemas de iluminación serán de tecnología LED con detectores de presencia, y se implementarán sistemas de gestión energética que optimicen el consumo.

La climatización combinará aerotermia, producción fotovoltaica en cubierta y ventilación controlada, con la posibilidad futura de integrarse en una comunidad energética para la venta del excedente de energía.

Este nuevo centro cívico en Hispanidad será el número 25 en la ciudad de Zaragoza, sumándose a una red que comenzó en los años 80 con el centro Salvador Allende en 1985 y que ha ido creciendo de manera constante.

Los últimos centros inaugurados fueron en 2024 en el Casco Histórico y en 2021 en Rosales del Canal, que supuso una inversión de aproximadamente 1,3 millones de euros.

La creación de estos espacios ha sido fundamental para fortalecer la participación ciudadana, promover actividades culturales y ofrecer servicios sociales en diferentes barrios, adaptándose a las necesidades cambiantes de la población.

A lo largo de los años, Zaragoza ha demostrado un compromiso firme con la mejora de sus espacios públicos y la participación vecinal. Desde los primeros centros, construidos en los 80, hasta los modernos equipamientos de este siglo, la ciudad ha invertido en infraestructura social que fomenta la convivencia y el desarrollo comunitario.

La puesta en marcha del Centro Cívico Hispanidad representa una nueva etapa en esta trayectoria, prometiendo convertirse en un referente para la integración y el bienestar de sus residentes.

La expectativa es que, una vez finalizado, el centro sirva como un espacio abierto, inclusivo y sostenible, capaz de adaptarse a las necesidades futuras de la comunidad zaragozana.