Una jornada en el Distrito Delicias reúne a niños y adolescentes para recoger sus propuestas y acercar la participación infantil al Ayuntamiento, mediante una feria de seis puestos sobre juego, cultura y deporte.
El Consejo de Participación Infantil y Adolescente de Zaragoza (CIAZ) amplía su radio de acción y llega al Distrito Delicias con una iniciativa diseñada de forma colaborativa entre los recursos de infancia del barrio y el equipo técnico del proyecto CIAZ, coordinado por La Bezindalla.
La actividad se enmarca dentro del eje de trabajo anual del CIAZ, denominado 'Ocio saludable a través del juego, la cultura y el deporte', y se celebró el lunes 24 de noviembre de 2025, de 17:30 a 19:30 horas, en la sala La Rotonda del Centro Cívico Delicias.
En el proyecto participaron chicos y chicas de entre 8 y 14 años provenientes del CMTL Musaraña, el CMTL El Cuco y Aldeas Infantiles SOS, acompañados por educadores de referencia y coordinados por el equipo de apoyo al CIAZ, La Bezindalla.
La jornada se concibió como una experiencia dinámica, participativa y adaptada a la realidad del distrito, con un formato de 'feria' que reunió seis puestos organizados alrededor de tres ámbitos clave: juego, cultura y deporte.
Cada grupo, formado por unos cinco niños y niñas, debía superar pequeñas pruebas con movimiento antes de responder a preguntas de reflexión sobre su barrio, sus espacios de ocio y sus necesidades.
Entre las dinámicas destacadas figuraron juegos con aros, dinámicas cooperativas, música vinculada al distrito —como la canción 'Orgullo Delicias'— y mapas del barrio, herramientas que permitieron combinar la actividad física con la reflexión colectiva.
Uno de los elementos centrales fue el protagonismo de las consejeras infantiles del distrito, cuya implicación activa en la dinamización y en la exposición final de propuestas reforzó su papel como referentes para el resto de participantes.
Tras el recorrido por los puestos, los grupos presentaron en un espacio común algunas de las ideas y propuestas trabajadas. Contó con la presencia de la responsable municipal de los Programas de Infancia del Ayuntamiento, destinada a escuchar de primera mano las aportaciones de la infancia y la adolescencia.
Todas las reflexiones se recogerán e incorporarán al trabajo que el CIAZ presentará al Ayuntamiento en abril y que también será entregado en la Junta Municipal de Delicias.
La organización de la jornada fue posible gracias a un proceso previo de coordinación, que incluyó varias reuniones de trabajo, la recogida de propuestas de los propios niños y niñas y la colaboración entre entidades.
La Secretaría Técnica del CIAZ se encargó de la logística general, la merienda y los materiales divulgativos, mientras que La Bezindalla, como entidad dinamizadora de apoyo al CIAZ, asumió el liderazgo, el apoyo metodológico, la dinamización y la evaluación final.
'El CIAZ en el Distrito Delicias' se plantea como una experiencia piloto, de la que se esperan aprendizajes para su posible réplica en otros barrios de Zaragoza.
Es una apuesta clara por acercar la participación infantil y adolescente al territorio, reconocer su capacidad de análisis y dar valor a sus propuestas para construir un distrito más saludable, inclusivo y pensado también desde la mirada de quienes lo viven hoy y lo habitarán mañana.'
Históricamente, Zaragoza ha ido fortaleciendo estas vías de participación, y supuestamente iniciativas similares se han implantado en distintos barrios en años anteriores, lo que habría llevado a una agenda más coordinada entre servicios municipales y entidades vecinales.
Presuntamente la jornada contaría con un presupuesto estimado de 2.500 € destinada a la merienda, materiales y logística básica, con partidas adicionales para la producción de materiales divulgativos y el traslado de algunos elementos para los puestos.
Estas cifras, si bien circulan en fuentes cercanas al ayuntamiento, no han sido confirmadas de forma oficial y, por ello, se etiquetan como supuestamente sujetas a revisión.
En conjunto, la experiencia 'El CIAZ en el Distrito Delices' se presenta como una plataforma de aprendizaje y de empoderamiento para la infancia y la adolescencia, con miras a replicar el formato en otros barrios y a consolidar una cultura de participación que pueda influir en las decisiones municipales de Zaragoza a partir de las voces de quienes vivirán el urbanismo del mañana.