Se llevan a cabo trabajos de pavimentación en una calle clave del Casco Antiguo de Sevilla, con una inversión de 125.000 euros, para mejorar la seguridad vial, reducir el ruido y renovar la infraestructura urbana.
En la ciudad de Sevilla, se están realizando importantes trabajos de mejora en una de sus arterias principales, con una inversión de aproximadamente 125.000 euros. La intervención contempla la pavimentación de un tramo de 8.000 metros cuadrados, situado entre el centro de salud y la calle San Laureano, un paso fundamental para la entrada y salida del Casco Antiguo. Los trabajos se llevan a cabo durante la noche, con el objetivo de minimizar las molestias a los residentes y comerciantes de la zona. Desde el miércoles 3 de septiembre hasta el 10 del mismo mes, se realizarán cortes puntuales en el tránsito desde las 23:00 horas hasta las 6:30 de la mañana, aunque estos plazos podrían acortarse según avancen los trabajos.
El estado del asfalto en esa calle en particular había llegado a ser muy deteriorado, afectando tanto la seguridad vial como la calidad de vida de quienes transitan por allí.
La renovación del pavimento es una iniciativa que, además de mejorar la estética urbana, busca reducir los niveles de ruido y garantizar una circulación más segura y fluida.
Los materiales utilizados son de primera calidad, pensados para brindar resultado duradero y resistencia ante el paso del tiempo.
Estas obras se suman a las intervenciones previas en la zona, en particular en la calle Marqués de Paradas, donde se invirtieron más de 315.000 euros en la reurbanización del tramo comprendido entre las calles Pedro del Toro y San Laureano. Esa intervención fue diseñada para ordenar el estacionamiento en la zona, que anteriormente permitía la doble fila en algunos sectores, complicando la movilidad.
La reforma incluyó la ampliación de las aceras en una media de 80 cm, la adecuación del aparcamiento en batería y la reserva de un espacio cercano a San Laureano para estacionamiento de motos.
Asimismo, se realizaron mejoras en las redes de abastecimiento y saneamiento, a cargo de Emasesa, incluyendo la renovación de las infraestructuras y la mejora del alumbrado público.
Además, se implementó un itinerario peatonal accesible y se incrementó la masa arbórea, con la plantación de nuevos árboles en alcorques creados durante la última campaña de paisaje urbano.
Estas acciones forman parte de un plan integral para transformar la zona, haciendo que sea más segura, accesible y más agradable para residentes y visitantes.
El compromiso del Ayuntamiento de Sevilla en estas obras refleja su apuesta por la mejora de la calidad de vida urbana, fomentando un entorno más sostenible y amigable.
La inversión en infraestructura, junto con la planificación urbana y la participación ciudadana, son claves para el desarrollo de una ciudad moderna y habitable.
Con estas renovaciones, Sevilla continúa en su proceso de revitalización y modernización de su patrimonio urbano, promoviendo un espacio público más digno y funcional para todos.