En la ciudad de Sevilla, las autoridades municipales han confirmado una serie de medidas para apoyar a los comercios afectados por importantes proyectos de obras públicas en diferentes zonas del centro urbano.

El delegado de Economía y Comercio, Álvaro Pimentel, ha destacado que a partir de enero de 2026 se iniciará la elaboración de las bases para un nuevo programa de ayudas dirigidas específicamente a los pequeños y medianos negocios que enfrentan dificultades por las obras de mejora en calles como Méndez Núñez, Teodosio, Dueñas y Pagés del Corro, además del tramo norte de la Línea 3 del Metro.

Con un enfoque de diálogo y consenso, como ha sido tradición en las políticas de apoyo al comercio local, el Ayuntamiento busca diseñar una serie de fondos que respondan a las particularidades de cada zona.

Pimentel expresó que “cada barrio y cada obra presenta particularidades que deben ser analizadas en profundidad, para establecer parámetros de ayuda que sean efectivos y justos, garantizando la continuidad del comercio y la actividad económica en el centro de Sevilla”.

Estas medidas reflejan el compromiso del consistorio con un sector que, desde siempre, ha sido motor fundamental para la economía local y la vitalidad social de la ciudad.

La intención es que las ayudas lleguen a quienes más las necesitan, mediante criterios objetivos y verificables que acrediten el perjuicio económico ocasionado por las obras.

El delegado también resaltó las acciones de campo realizadas por el Ayuntamiento, como las visitas periódicas a los locales comerciales, en coordinación con los distritos municipales, para informar sobre las obras y las campañas de promoción y dinamización impulsadas en las zonas afectadas.

Además, subrayó que “la planificación y la coordinación son clave para que Sevilla pueda avanzar en sus infraestructuras sin que el comercio sufra daños irreparables”.

Desde hace décadas, Sevilla ha sido un ejemplo de crecimiento urbanístico, con proyectos que han revitalizado el casco antiguo y áreas emblemáticas de la ciudad.

Sin embargo, estos avances han generado ciertos desafíos para el comercio local, especialmente en zonas donde las obras de infraestructura han provocado reducciones en la afluencia de clientes.

Para hacer frente a esto, el Ayuntamiento ha puesto en marcha diferentes programas de apoyo ya existentes, y ahora anuncia una nueva línea de ayudas específicas, que en esta ocasión se estima que contará con un presupuesto cercano a los 300.000 euros. La iniciativa forma parte de una estrategia integral para equilibrar el desarrollo urbanístico y la conservación del comercio, con un enfoque en la sostenibilidad y el bienestar económico.

Por su parte, las asociaciones del sector han acogido con satisfacción estas medidas. La Federación de Comerciantes de la Macarena, la Asociación de Hosteleros de Sevilla, y otras organizaciones empresariales locales han participado en reuniones para aportar propuestas y garantizar que las ayudas respondan a las necesidades reales de los comerciantes.

Este esfuerzo conjunto evidencia una voluntad de promover una recuperación económica sólida, que permita tanto el crecimiento de infraestructuras como la supervivencia y revitalización del comercio tradicional en Sevilla.